MI REFUGIO.
11:58
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Ir
a buscar comida al fiado nunca fue ni será jamás algo cómodo. Por el contrario,
en algunos casos despierta vergüenza. Al fin y al cabo se trata de un favor.
–Lo
siento, don Aníbal. Ya tiene una cuenta bastante grande y, perdóneme la
franqueza, no veo que consiga trabajo—le dijo el propietario del negocio.
–Pero
lo he intentado—repuso el hombre.
–No lo dudo, don Aníbal, pero se que me comprenderá. Son
negocios. No puedo dejarme mover por el corazón…—y dio la espalda para atender
a un cliente que llegaba.
Aquél
día razonó que es cuando hay solidez económica; cuando menguan los recursos,
todos quieren hacerse a un lado. Es como si dijeran: “No queremos estar junto a
los fracasados”.
Llegó
a su casa dispuesto a seguir adelante. No podía darse el lujo de contagiar a su
familia con el desánimo. Prometió ir en “busca de algo”. Y aunque arrastraba
los pies con desgana, reemprendió la tarea de buscar trabajo.
Lo
embargaba la firme convicción de que, aunque llevaba tres semanas en la misma
tarea, de que Dios lo socorrería. Y la respuesta se produjo. Consiguió trabajo
en un taller de mecánica. Lavaba repuestos con gasolina. Poco a poco pudo
ponerse al día, saldando la totalidad de las deudas.
Los
problemas amenazan con robarnos la paz. Sin embargo, cuando depositamos la
confianza en Aquél que todo lo puede, logramos salir de la crisis. No permita
que lo embargue la desesperación. Busque una salida. Está en Dios. Él está con
nosotros. Nos extiende su mano brindando la ayuda que necesita.
Salmos
31:1
En
ti, oh Jehová, he confiado; no sea yo confundido jamás;
Líbrame en tu justicia.
Líbrame en tu justicia.
Tomado de Renuevo de Plenitud
EL HERMOSO COLOR DEL AMOR
11:53
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¿De
qué color es Dios?,
preguntó el niño de piel clara.
¿Es blanco como yo,
son sus cabellos dorados como el sol?
preguntó el niño de piel clara.
¿Es blanco como yo,
son sus cabellos dorados como el sol?
¿Es
Dios moreno como yo?.
Preguntó el niño de piel con matiz bronceado.
¿Tiene el cabello oscuro y rizado,
son sus ojos negros o azulados?
Preguntó el niño de piel con matiz bronceado.
¿Tiene el cabello oscuro y rizado,
son sus ojos negros o azulados?
Pienso
que Dios es piel roja como yo,
se escucha decir al niño indio.
Lleva una corona de plumas,
y transforma en día nuestras noches umbrías.
se escucha decir al niño indio.
Lleva una corona de plumas,
y transforma en día nuestras noches umbrías.
Todos
sabemos que allí está Dios,
en todos los colores mencionados.
Pero ten esto por seguro: el único color de nuestro Creador,
es el hermoso color del amor.
en todos los colores mencionados.
Pero ten esto por seguro: el único color de nuestro Creador,
es el hermoso color del amor.
Así
que cuando tu alma vaya al cielo,
cuando tu vida llegue a su final,
Él estará esperando y hacia ti
su mano extenderá.
cuando tu vida llegue a su final,
Él estará esperando y hacia ti
su mano extenderá.
No
habrá colores en el cielo,
todos seremos iguales.
Sólo serás juzgado por tus actos terrenales,
allí ni tu raza ni tu nombre serán importantes.
todos seremos iguales.
Sólo serás juzgado por tus actos terrenales,
allí ni tu raza ni tu nombre serán importantes.
Así
que cuando llegue, tu hora
y admires a Dios arriba en su reino,
verás el único color que en realidad tiene valor,
y es el hermoso color del amor.
y admires a Dios arriba en su reino,
verás el único color que en realidad tiene valor,
y es el hermoso color del amor.
Arnold
Sparky Watts
1
Juan 4:7-11
7 Amados,
amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido
de Dios, y conoce a Dios.
8 El
que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor.
9 En
esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió a su Hijo
unigénito al mundo, para que vivamos por él.
10 En
esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él
nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados.
11 Amados,
si Dios nos ha amado así, debemos también nosotros amarnos unos a otros.
Tomado de Renuevo de Plenitud.
TORMENTA FINAL.
11:35
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Luego de
perder por solo un voto sus elecciones para alcalde en Hickory, Mississippi en
1993, Charlie Lewis se mudó a Michigan.
Decidió
gozar de la vida tranquila de un retirado, creyendo que el pedido de recusación
de las elecciones que había solicitado al tribunal era poco probable que
sucediese.
Y entonces ocurrió un llamado telefónico inesperado,
solicitando que regresara a Mississippi. El Tribunal Supremo del estado había
anulado tres votos ausentes para Wayne Griffith, el alcalde residente, quedando
sin efecto su victoria y convirtiendo a Lewis en el ganador por un margen de
dos votos: 115 a 113.
“Habían sido
más de dos años”, dijo Lewis, de setenta y dos años de edad en respuesta a la
noticia. “Supuse que me habían olvidado… creo que cuando se llega a mi edad se
aprende a digerir pacientemente las cosas”. No obstante, estaba entusiasmado
con la decisión del tribunal y las oportunidades que le aguardaban.
Lewis se
convirtió en el primer alcalde de color de la pequeña ciudad de quinientos
residentes, en las colinas de arcilla roja del este de Mississippi.
“He esperado
un poco, pero la ley se tomó mucho tiempo”, dijo.
La espera
puede quitar algo del entusiasmo de la victoria, pero si la causa es buena, la
espera nunca destruye el gozo del triunfo final.
Prefiero
fracasar en una causa que algún día triunfará,
que triunfar en una causa que algún día fracasará.
que triunfar en una causa que algún día fracasará.
2
Corintios 2:14
14 Mas
a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús, y por
medio de nosotros manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento.
Tormentas- reflexión.
20:35
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Cuentan
que un día un campesino le pidió a Dios le permitiera mandar sobre la
Naturaleza para que -según él – le rindieran mejor sus cosechas.
¡Y Dios
se lo concedió!
Entonces
cuando el campesino quería lluvia ligera, así sucedía; cuando pedía sol, éste
brillaba en su esplendor; si necesitaba más agua, llovía más regularmente; etc.
Pero
cuando llegó el tiempo de la cosecha, su sorpresa y estupor fueron grandes
porque resultó un total fracaso. Desconcertado y medio molesto le preguntó a
Dios por qué salió así la cosa, si él había puesto los climas que creyó
convenientes.
Pero
Dios le contestó – “Tú pediste lo que quisiste, más no lo que de verdad
convenía. Nunca pediste tormentas, y éstas son muy necesarias para limpiar la
siembra, ahuyentar aves y animales que la consuman, y purificarla de plagas que
la destruyan…”-
Así nos
pasa: queremos que nuestra vida sea puro amor y dulzura, nada de problemas.
El
optimista no es aquel que no ve las dificultades, sino aquel que no se asusta
ante ellas, no se echa para atrás. Por eso podemos afirmar que las dificultades
son ventajas, las dificultades maduran a las personas, las hacen crecer.
Por eso
hace falta una verdadera tormenta en la vida de una persona, para hacerla
comprender cuánto se ha preocupado por tonterías, por chubascos pasajeros.
LO
IMPORTANTE NO ES HUIR DE LAS TORMENTAS, SINO TENER FE Y CONFIANZA EN QUE PRONTO
PASARÁN Y NOS DEJARÁN ALGO BUENO EN NUESTRAS VIDAS.
Habacuc
3:17-19
Nahúm 1:7
Salmos 9:9
Nahúm 1:7
Salmos 9:9
Tomado de: http://www.renuevodeplenitud.com/tormentas.html